Mientras se ultiman los detalles para la jura de Senadores que tendrá lugar hoy a la tarde, la vicepresidenta electa Cristina Fernández de Kirchner ya dejó en claro su intención de abrir el juego legislativo al conjunto de gobernadores peronistas del interior y alejar así cualquier hermetismo vinculado al kirchnerismo duro de su entorno.

La aparición del nombre de Claudia Abdala –ex gobernadora de Santiago del Estero- como posible presidenta provisional del Senado selló la búsqueda de la ex presidenta de entregar los espacios legislativos clave al peronismo nacional. Esta idea responde a la necesidad de mostrar unidad y federalismo en un momento delicado para la Argentina, donde el peronismo deberá mostrarse sólido y escuchar todas las voces.

Además, esta maniobra permitiría no sólo despejar los rumores mediáticos sobre el presunto acaparamiento de La Cámpora dentro del nuevo esquema de Gobierno, sino también ofrecería a Alberto Fernández un escenario de acuerdo hacia adentro de un peronismo ahora amplio y diverso, para garantizar una gobernabilidad que será más que necesaria al presidente electo de cara a los meses que se aproximan.

Con un armado de senadores que lograría el quórum propio, los acuerdos de CFK en la Cámara Alta incluyen también la integración como jefe de Bloque del formoseño José Mayans –peronista del riñón del gobernador Gildo Insfrán- y el referente peronista de Misiones, Maurice Closs.

En tanto, el actual senador por Neuquén y jefe del bloque del FpV Marcelo Fuentes -se le vence el mandato en diciembre- seguirá en el Senado: quedará como secretario Parlamentario.

El nombre del bloque será Frente de Todos. Será la fusión entre los bloques Frente para la Victoria-PJ, Justicialista, Frente Cívico por Santiago, Peronismo Tucumán, Partido Justicialista La Pampa, Misiones, Chubut Somos Todos, Justicialista Chubut y Justicialismo San Luis.