Mientras comienzan a acomodarse los nombres para los diferentes espacios del gobierno que se viene, Alberto Fernández evalúa la posibilidad de otorgarle a Daniel Scioli el cargo de embajador, ni más ni menos que en el Brasil de Jair Bolsonaro.

Es que el perfil de cuadro “moderado” que encarna Scioli sería clave para recomponer relaciones con el mandatario brasileño de ultraderecha que cada vez genera más fricciones con el nuevo gobierno argentino. El posicionamiento de Argentina ante Brasil es de suma prioridad también por tratarse de uno de sus principales aliados comerciales.

Cabe señalar que han sido varias las señales de hostilidad de Jair Bolsonaro hacia el retorno del peronismo al poder en Argentina. La más reciente fue la amenaza del mandatario con sacar a Brasil del Mercosur “si Argentina pone trabas comerciales”.

El jefe de Estado del país vecino también había mostrado su preocupación antes de las elecciones argentinas, al señalar que nuestro país podría convertirse en “otra Venezuela” en caso de retornar el justicialismo al poder, en especial Cristina Fernández de Kirchner.

En tanto, Daniel Scioli se posiciona como el presunto hombre apuntado por Fernández para asumir la delicada tarea de retomar el diálogo con el gobierno brasilero, en un escenario de fuerte convulsión a nivel regional. El ex gobernador de la provincia de Buenos Aires deberá mostrar capacidad de pragmatismo y diplomacia para recomponer relaciones con un gobierno de ultraderecha que decidió dar la espalda a los progresismos de Sudamérica.