En las últimas horas se conoció un nuevo revés de la Justicia contra ex funcionarios de la gestión de gobierno de Cambiemos. En este caso, se trata del ex titular de Vialidad Nacional durante la era Macri, Javier Iguacel, quien fue procesado por presuntas irregularidades en los contratos de concesión de peajes de los Accesos Norte y Oeste.

Fue el juez Rodolfo Canicoba Corral quien decidió avanzar contra Iguacel y contra el ex procurador del Tesoro y ex abogado de la familia Macri, Bernardo Saravia Frías, quienes ahora enfrentan un embargo por 500 millones de pesos a cada uno. Según informó la señal C5N, ambos funcionarios son acusados de delitos de perjuicio contra a la administración pública y administración fraudulenta.

Cabe destacar que por esta misma causa, han sido llamados a indagatoria el ex ministro de Transporte Guillermo Dietrich; el ex ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne; el ex director de Jurídicos de esa dependencia, Ricardo Stoddart; y el presidente del directorio de Autopistas del Sol SA, Andrés Alfonso Barberis Martín.

Los ex funcionarios de la gestión Cambiemos y el empresario serán indagados por “maniobras defraudatorias” que, según el palabras del propio Canicoba Corral, resultaron “gravemente lesivas para las arcas del Estado”. Según trascendió, se investiga que los contratos de negociación de los peajes de Accesos Norte y Oeste hayan beneficiado a empresas vinculadas con Mauricio Macri.

Por su parte, el propio Iguacel no se quedó callado ante este avance judicial y decidió contestarle a Canicoba Corral. “El juez renunciado Canicoba me proceso en 1 día. No quiere que sea testigo en la causa de Obra Pública. Lo recusé y le pedí la prueba. Hizo oídos sordos. Siempre estaré para que haya justicia. Declarando como testigo o dando cualquier explicación que requiera un juez imparcial”, disparó el funcionario ahora procesado, que decidió tildar al juez Canicoba Corral de “parcial”.

En tanto, este hecho pone una nueva mancha en la ya salpicada imagen del ex presidente y conductor de Juntos por el Cambio, que en este momento enfrenta también las investigaciones por la presunta mega-red de espionaje ilegal durante su mandato.