En medio de un fuerte aumento de la expansión del coronavirus, desde los distritos del Gran Buenos Aires comienzan a ver con rechazo la nueva etapa de flexibilizaciones que decidió impulsar la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, cuya imagen más fuerte fue la de apertura de bares y restaurantes el último fin de semana. Por ello, un intendente de la zona sur del conurbano bonaerense apuntó contra la gestión de Horacio Rodríguez Larreta por los brotes de COVID19 en las ciudades periféricas a CABA.

Hubo un quiebre que evidentemente perjudicó la tarea que nosotros habíamos llevado, cuando los medios exaltaban esa apertura que hizo la Ciudad como algo muy importante para cuidar los intereses económicos”, fueron las palabras de Juan José Mussi, intendente de Berazategui, en relación al “relajamiento” porteño.

En ese momento ya lo interpretamos como erróneo, cuando comenzó el traslado de ciudadanos del segundo cordón del Conurbano hacia la Ciudad, y poco tiempo después vino el aluvión de casos”, agregó el alcalde.

En ese sentido, Mussi fue a fondo y adjudicó el agravamiento de la problemática en el AMBA a las medidas tomadas por la gestión de Larreta, a quien apuntó por “no poder soportar los embates de sus propios seguidores” en el marco de las medidas de ASPO.

En diálogo con Télam, Mussi consideró que el Gobierno porteño “no pudo soportar los embates de sus propios seguidores o correligionarios, y por eso se trasladó la enfermedad al Conurbano, es una absoluta realidad”.

En esa línea, el jefe Comunal remarcó: “Nosotros veníamos sobrellevando bien el tema de evitar las aglomeraciones en los espacios públicos, en los comercios, pero, como producto del avance que tuvieron los anticuarentena en la ciudad, tengo que reconocer que esto se nos fue escapando de las manos”.

El intendente de Berazategui se explayó sobre la situación de contagios en su propia ciudad y sostuvo que, entre marzo y julio, se desarrolló el 16% de los casos, pero que “el 84% sucedió en agosto”, producto del traslado de ciudadanos a trabajar en CABA, cuyo gran porcentaje está internado allí, porque sus patrones le dan la obra social local.