Desde el Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, aseguraron que para la violencia de género "no debe haber prisión domiciliaria" y pidieron a los jueces "que prioricen la seguridad de mujeres, niños, niñas y adolescentes ante la decisión de excarcelar a personas por delitos contra la integridad sexual y femicidios, entre otros".

A través de un comunicado, desde la cartera bonaerense conducida por Estela Díaz, destacaron que este pedido lo formulan "en virtud de la independencia de poderes" y de que esta "es una decisión exclusiva del Poder Judicial" y advirtieron que realizar excepciones sin respetar este criterio "podría generar responsabilidad internacional para el Estado argentino".

Además, precisaron que la emergencia sanitaria desatada por la covid-19 "generó que en muchos países del mundo se tomen medidas excepcionales para evitar la vulneración al derecho a la salud de las personas privadas de la libertad," en un contexto de hacinamiento carcelario. Pero que el cambio de las condiciones de detención "debe otorgarse considerando que no expongan a riesgos a las personas que han sido víctimas de violencia por razones de género, dadas las especialísimas características de este tipo de delitos, en muchos de los casos cometidos en el propio domicilio".

El Ministerio de las Mujeres también recordó que la Sala I del Tribunal de Casación bonaerense "desaconsejó que durante el período de vigencia del aislamiento decretado por el Poder Ejecutivo Nacional, se dicte el arresto domiciliario a personas imputadas o condenadas por la comisión de delitos graves".

En este punto ingresaron, los delitos contra la vida, la libertad, la integridad sexual y aquellos cometidos en un contexto de violencia de género, para lo cual debía de considerarse los derechos de las víctimas.