Luego de mantener un encuentro con el canciller argentino, Felipe Solá y con el embajador Daniel Scioli, el presidente de Brasil Jair Bolsonaro propuso reunirse con Alberto Fernández el 1 de marzo, en Uruguay, con asuma Luis Lacalle Pou como mandatario del vecino país.

En busca de recomponer la relación con Brasil, Fernández envió a Solá y Scioli a reunirse con Bolsonaro, uno de los líderes regionales que más rechazo mostró a la candidatura de la fórmula Fernández-Fernández. Sin embargo, la reunión fue “fructífera” y el brasileño se mostró dispuesto al diálogo con su par argentino.

“Hay cosas que se entienden cuando uno está acá o cuando de acá van a la Argentina. Sí, han cambiado las cosas”, dijo Solá tras el encuentro a Télam.

 “Les pedimos a Brasil que nos apoye en la manera que puedan en el FMI porque (la deuda) es el primer paso de una escalera, porque en caso de un buen acuerdo pedimos tiempo para crecer y para pagar. No caeremos en default”, destacó el Canciller.

Solá puso el foco en la recuperación económica y en la importancia de estos acuerdos, situación que también le interesa a Brasil para hacer crecer las exportaciones. "El futuro de Argentina necesita de esta negociación y nos condiciona al momento de pensar en el futuro. Esto ha influido para no tener una ratificación inmediata del acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur”, dijo.