El ministro de Hacienda de la Nación, Hernán Lacunza en una conferencia de prensa antes de partir a Estados Unidos a reunirse con autoridades con el Fondo Monetarios Intercional, le restó importancia a la deuda tomada por el Gobierno y reconoció que se complicará el desembolso.

“No hay tiempo que perder para renegociar la deuda externa con los acreedores”, aseguró el Ministro, quien aseguró que este proceso tiene que ser de manera "rápida y voluntaria".

El Ministro aseguró que Argentina "tiene un problema de liquidez, no de solvencia", al tiempo que buscó minimizar los niveles de endeudamiento."Hay que conversar con los acreedores sobre la sustentabilidad de la deuda. La Argentina necesita recuperar el crédito voluntario. Los niveles actuales de deuda no son tan importantes, pero ningún país puede pagar cash sus compromisos", agregó Lacunza.

El titular de Hacienda también se refirió a las declaraciones del candidato del Frente de Todos, Alberto Fernández quien aseguró en el debate presidencial que cuando Mauricio Macri asumió la deuda externa del "38% del PBI. Hoy es del 100%”.

Lacunza detalló  “a fines de septiembre la deuda pública total era de USD 314.618 millones, un 68% en términos del PBI. De ese total USD 115.871 millones se distribuía intrasector público; USD 73.000 millones con organismos de crédito multilateral; y USD 126.000 millones con el sector privado. Estos dos últimos representan el 43% del PBI".

“La variación de la deuda pública equivale al resultado fiscal. Para que baje la deuda tiene que bajar el déficit. Hay que elegir una de las dos cosas. Y ese dilema, que es elegir entre reducir el déficit o reducir la deuda, no lo resuelve el Poder Ejecutivo de turno. El resultado de ese dilema está dado por la interacción de las fuerzas políticas en el Parlamento, porque la ley de Presupuesto establece determinado nivel de gastos e ingresos y muchas veces en el proceso negociador terminan surgiendo más gastos y menos impuestos, lo cual lleva a un mayor nivel de deuda. También intervienen las Provincias y los fallos judiciales que modifican el reparto de fondos. Es decir, el nivel de deuda termina siendo el fruto de una decisión colectiva, democrática”, consideró el Ministro.

Este viernes, Lacunza se reunirá con autoridades del FMI, pero ya reconoció que las perspectivas del organismo son un “poco más negativas” que las esperadas, al tiempo que desechó novedades en relación con el desembolso de 5.400 millones de dólares que aún resta del organismo. “Es una reunión de seguimiento”, aseguró.

“Creemos que una vez resuelta la incertidumbre política y financiera por el perfil de la deuda, se estaría en condiciones de retomar el crecimiento antes de mediados del año próximo”, sostuvo. “Si se recupera el crecimiento, antes va a percibirse un alivio y recuperación en la actividad y consumo”, consideró.

Vale recordar que el FMI estimó una inflación anual del 57% durante 2019 y una recesión del 3,1%. Mientras que los pronósticos para el 2020 son pocos favorables con una infflación del 38,2% y una caída del PBI del 1,3%.