El ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, reconoció que hay "mucha tensión" en las negociaciones con los acreedores privados para reestructurar la deuda externa, e informó que esta semana se reanudan los diálogos en virtud de concretar un exitoso canje. 

"Hay mucha tensión y frustración porque los bonistas apostaron a Argentina y la economía no anduvo bien y fue un colapso económico. Es normal que haya tensiones y cada uno defiende sus intereses", expresó el ministro en una entrevista con la TV Pública.

El funcionario dijo  que la oferta de canje, que ofrece una quita de capital de 5,4%, reducción de intereses del 62% y un período de gracia de tres años es una "propuesta de buena fe" basada en las capacidades de pago del país. "Esta propuesta que estamos haciendo es una propuesta de buena fe, en el sentido de que es lo que Argentina puede pagar y que se pueda cobrar lo que se pueda cobrar", sostuvo. 

"Esta semana vamos a tener el road show (encuentros) con los acreedores, que esta vez será virtual pero ya entramos a discutir la propuesta. Lo que buscamos es darle condiciones al país para que, una vez pasado el nuevo coronavirus, la propuesta se pueda mantener en el tiempo", agregó Guzmán.

El ministro manifestó que "todo está sobre la mesa, el período de gracia, los intereses de los bonos y los vencimientos de los títulos. La Argentina hoy no tiene capacidad de pago, pero hicimos una oferta a los acreedores que la Argentina puede cumplir. La oferta tiene el aval del FMI y el staff técnico avaló la propuesta porque había juzgado que estaba en línea con las posibilidades de pago del país".

Respecto del coronavirus, Guzmán dijo que "hemos definido que lo primero es la salud y tendremos que tomar medidas para adaptar la economía a la cuarentena y tendrá que durar lo que tenga que durar, para asegurar la salud de los argentinos. La actividad económica está cayendo por la pandemia, el sistema está preparado para la circulación de bienes y personas pero eso no se está dando ahora y por eso tomamos medidas para proteger a los sectores más vulnerables".

En relación con las medidas tomadas para las empresas, expresó que "vamos a necesitar a las empresas por eso dispusimos medidas para proteger el trabajo y la producción y las perspectivas van a ser mejores si se preservan las empresas. Hay medidas que se tomaron para una cuarentena corta pero se alargó. Los préstamos para pagar salarios es una medida que tiene límites pero luego tuvimos que hacer una asistencia directa pagando parte de los salarios".

"Las consecuencias de abrir la economía de golpe son inciertas, se va abriendo la economía pero vamos tomando medidas pero siempre cuidando a la gente", remarcó el funcionario. 

Finalmente, el ministro apoyó el proyecto de ley denominado como "impuesto a la riqueza", al señalar que "la Argentina tiene restricciones de financiamiento y hay que buscar maneras para obtener financiamiento por eso se le pide un esfuerzo de solidaridad a sectores que tienen capacidad. Nosotros apoyamos el proyecto de impuesto a la riqueza pero necesitamos cierto financiamiento para atender a los sectores más vulnerables".