Como parte del paquete de medidas que lanzó el gobierno nacional para amortiguar el impacto de la crisis económica que atraviesa el país, la Secretaría de Energía que conduce Darío Martínez extendió el congelamiento de la tarifa eléctrica mayorista hasta el 30 de abril de 2022.  

A través de la resolución N° 1029 publicada en el Boletín Oficial, el Ejecutivo informó esta medida que le garantizará a las distribuidoras eléctricas que no se les cobre un precio mayor en el verano por ese suministro.

Además, la Secretaría estableció los precios de referencia hasta después del verano, por lo que compañías como Edesur, Edenor, Edelap o las que operan en el interior de la provincia de Buenos Aires no deberán trasladar un ajuste tarifario a sus clientes.

El costo de generación representa hasta un 40% de la factura y el valor actual de un Mwh (la unidad de medida) es de $ 6.333, según Cammesa. La parte que las distribuidoras le pueden pasar a sus clientes es $ 900. El resto lo deben absorber las propias distribuidoras o se encarga el Estado a través de subsidios.

De acuerdo a estimaciones oficiales, los subsidios cerrarán este año cerca de los US$ 8500 millones, esto es un 35% más que en 2020. Por su parte, las distribuidoras aseguran que como consecuencia del atraso de las tarifas eléctricas dispuesto por el gobierno de Alberto Fernández  enfrentan un rojo de más de $ 200.000 millones.