El diputado del Frente de Todos, Martín Soria, denunció al presidente de la Cámara Federal de Casación Penal, Gustavo Hornos, por considerarlo partícipe de la llamada mesa judicial del macrismo. 

El legislador oficialista justificó su pedido en que el magistrado habría asistido en, al menos, seis oportunidades entre 2016 y 2018 a la Casa Rosada para supuestamente encontrarse con Mauricio Macri. 

En la sesión en Diputados, Soria  aseguró que en la gestión de Cambiemos "se manipulaba a la Justicia” y dijo que la gestión anterior “convirtió a la Casa Rosada en la sede oficial del lawfare”, al afirmar que el despacho del expresidente se convirtió a su vez “en la agencia de Clarín y La Nación”.

El que salió al cruce fue el diputado de Juntos por el Cambio, Fernando Iglesias, que protestó contra las denuncias, justo el mismo día en que el fiscal Jorge Di Lello impulsó la denuncia por enriquecimiento que había presentado Tailhade en su contra. 

Soria, junto a otros legisladores que acompañaron la denuncia, revisó los registros de entradas a la Casa de Gobierno, suministrados a la organización Poder Ciudadano, y detectaron seis ingresos de Hornos, que coinciden con fallos adversos para funcionarios kirchneristas. “Que un juez interviniente en causas en donde se investiga a funcionarios opositores se reúna en privado con un presidente de la Nación es, en sí mismo, un hecho escandaloso y digno de investigación judicial”, dice la presentación que hicieron Soria, Rodolfo Tailhade y Gustavo Valdés ante el fiscal Franco Picardi, que tiene delegada la investigación sobre la mesa judicial macrista.

Y agregan: "Cuando esa sospecha es contrastada con las resoluciones judiciales firmadas por el magistrado con posterioridad a aquellos encuentros, entonces, se confirma la teoría de la participación del juez Hornos en la famosa ‘Mesa Judicial’. La animosidad de las decisiones judiciales del camarista respecto de exfuncionarios y empresarios relacionados con el kirchnerismo es patente”.

Los encuentros relevados por los tres diputados oficialistas comienzan a poco de asumido Macri y se extienden hasta finales de 2018.