En medio de la fuerte controversia por las denuncias por violaciones a los derechos humanos en la provincia de Formosa, desde Casa Rosada endurecieron la postura frente a los señalamientos de Amnistía Internacional, que presentó sus críticas a la situación en el territorio gobernado por Gildo Insfrán. En ese sentido, fue el jefe de Gabinete de Nación, Santiago Cafiero, quien brindó declaraciones y desafió a las denuncias respaldadas por la oposición.

No necesitamos que nos digan a los argentinos, mucho menos a nuestro espacio político que tiene siempre una especial sensibilidad en el respeto de los derechos humanos; nosotros somos hijos de las madres y de las abuelas, así que a nosotros no nos tienen que venir a decir qué tenemos que hacer con los derechos humanos”, expresó Cafiero esta mañana en diálogo radial con La Red.

Las palabras del vocero de Balcarce 50 se dieron en pleno marco de críticas y observaciones presentada por Paola García Rey, directora de Amnistía Internacional en Argentina, entidad que solicitó la intervención del Estado nacional en la provincia del noreste.

“¿Hoy en Formosa se están violando los derechos humanos? Absolutamente sí: hay detenciones arbitrarias, condiciones inhumanas de aislamiento, maltratos a niños detenidos en las mismas condiciones que los adultos, mujeres y varones en los mismos lugares violando la intimidad”, señaló García Rey.   

Cabe recordar que, desde hace semanas, trascendieron fuertes denuncias hacia la gestión de Insfrán debido a las condiciones en que se encuentra alojada la población de riesgo en los centros de aislamiento formoseños, así como en las estrictas políticas de aislamiento en las fronteras provinciales por causa de la pandemia. A esto se sumó la detención de concejales de la oposición, episodio que desató la reacción inmediata contra el mandatario.

Sí hubo casos de violencia institucional de la Policía que se están estudiando”, expresó Cafiero y agregó: “El tema no está terminado para nada, pero tampoco hay que hacer un estiramiento político. Muchos de los que están en los centros de aislamiento están enojados y enojar más a los enojados no va a servir de nada”.