Este martes el intendente linqueño, Salvador Serenal lanzó un nuevo cronograma de salidas y con nuevas excepciones en el marco de la cuarentena a través del el decreto 1541/20, que fue cuestionado por los concejales por el Frente de Todos  porque "posee asombrosas coincidencias textuales con la norma 1060/20 de la ciudad de Olavarría", conducida por el macrista Ezequiel Galli.

El decreto de Serenal, al igual que el de Galli,  establece un cronograma según la terminación del DNI para aquellas personas que tengan que salir a proveerse de insumos de primera necesidad o realizar trámites de urgencia y establece multas entre los $6000 y $8000 a quienes incumplan estas medidas.  También prohíbe la circulación de menores de edad, salvo por regímenes de visitas 

A la vez el linqueño  nuevos rubros comerciales, entre los que se destacan la venta de indumentaria, electrodomésticos, muebles, insumos informáticos, concesionarias de autos y motos. Al mismo tiempo, se autoriza lavaderos de vehículos, peluquerías, barberías, manicuras, casas de depilación o estética. Todo estas áreas podrán trabajar de lunes a sábados de 7 a 10 y de 13 a 16 horas y deberán pedir DNI a quiénes ingresen a sus comercios.

Desde el Frente de Todos se mostraron críticos a las nuevas disposiciones y cuestionaron a Serenal por no consultar a la oposición. Al mismo tiempo, destacaron que  “el decreto 1541/20, que establece el nuevo esquema de circulación de personas dentro del distrito de Lincoln, posee asombrosas coincidencias textuales con la norma 1060/20 de la ciudad de Olavarría”.

“Esto nos permite inferir que el diseño del sistema de salidas que se aplicará en Lincoln nada tiene que ver con una decisión estudiada y a medida de los requerimientos de nuestra comunidad, sino más bien la copia del decreto que aplica a la realidad de una ciudad de más de 100 mil habitantes", advirtieron desde la oposición.

 Por otro lado, mostraron su rechazo a las multas a los comerciantes “por el solo hecho de ejercer su actividad, o contra los vecinos por la simple razón de ir a comprar”.

“Consideramos que este tipo de medidas son diametralmente opuestas a la posibilidad de promover la reactivación comercial que el intendente Serenal planteó en sus declaraciones públicas”, sostuvieron.

“No avalamos la obligación impuesta a los comerciantes para que ejerzan poder de policía, ya que deberán solicitar a sus clientes el documento de identidad con el fin de corroborar el cumplimiento del nuevo esquema de circulación de personas”, concluyeron.